Un lugar para perderse

Un lugar para perderse

lunes, 7 de septiembre de 2015

Un nuevo curso comienza

Estamos ya a 7 de septiembre y mañana me toca volver a Córdoba mi segunda ciudad, mi segundo hogar. Este curso he aprendido a valorarme, a confiar en mí misma. He disipado muchas dudas y también tengo otras nuevas, siempre hay misterios que descubrir.
Deciros que mis amigas, las de toda la vida siguen aquí dando el coñazo y yo estoy tan feliz de tenerlas después de todas las dificultades debido a la distancia y peleas que hemos tenido, seguimos juntas y ya pocas cosas podrán separarnos.
La verdad es que estoy muy poco inspirada hoy para escribir, solo decir que tengo muchísimas ganas de volver a ver a mis amigos de la facultad y del colegio, de salir, de descubrir sitios nuevos y de conocer personas increíbles. Tengo ganas de perderme un día soleado (que no caluroso) por la judería, de disfrutar de las mil flores de los patios y del olor de la lluvia. Tengo ganas de aprender mil términos  nuevos, de hacer prácticas con animales y de conocer un poco mejor mi futura profesión. Tengo ganas de fotografiar cada momento, de exprimirlo, de que cada segundo se quede en mi memoria y de no darle importancia a las pequeñas riñas o discusiones. Tengo ganas de enamorarme de nuevos poemas y canciones; de vibrar con cada sinfonía, de emocionarme con cada palabra.
Tengo ganas de disfrutar de un gran año, de superar los obstáculos que se me presenten, de luchar por alcanzar mi sueño y de ser feliz.

"La felicidad no es un destino, es un camino" (al final si que he escrito)
Hoy en mi casa, y mañana también.